La belleza sueca Dora Venter arranca una fiesta salvaje, liberando su insaciable apetito de placer. El grupo sucumbe a los deseos carnales, disfrutando de las delicias del regazo de bocas, las fiestas apasionadas de coño y las explosivas escapadas llenas de semen. El encanto europeo se encuentra con la pasión cruda en esta inolvidable orgía al aire libre.